La deformación del espacio-tiempo es un concepto fundamental en la teoría de la relatividad general de Einstein. Según esta teoría, la presencia de masa y energía en el universo curva el espacio-tiempo a su alrededor, afectando la trayectoria de los objetos que se mueven a través de él. Esta curvatura del espacio-tiempo es lo que percibimos como la fuerza de la gravedad.
Descripción
Los agujeros de gusano y los agujeros negros son dos manifestaciones extremas de esta deformación del espacio-tiempo. Los agujeros de gusano, también conocidos como puentes de Einstein-Rosen, son hipotéticas conexiones entre dos regiones diferentes del espacio-tiempo. Se visualizan a menudo como túneles que atraviesan el espacio-tiempo, lo que podría permitir viajes interestelares o incluso intergalácticos si fueran estables y atravesables.
Los agujeros negros, por otro lado, son regiones del espacio-tiempo donde la curvatura es tan intensa que nada, ni siquiera la luz, puede escapar de su atracción gravitatoria. Estos objetos nacen del colapso gravitacional de estrellas masivas y están rodeados por un horizonte de eventos, más allá del cual la gravedad es tan fuerte que ni siquiera la información puede escapar.
La deformación del espacio-tiempo también tiene implicaciones en fenómenos como las ondas gravitacionales, que son ondulaciones en el espacio-tiempo producidas por eventos cataclísmicos como la fusión de agujeros negros o estrellas de neutrones. La detección de estas ondas en 2015 confirmó una predicción fundamental de la teoría de la relatividad general de Einstein.